Petra ocupa un lugar destacado en la lista de lugares deseados de cualquier viajero. Es uno de los sitios más fascinantes e impresionantes del mundo. Hace rato tenia ganas de ir, pero no se me había presentado la oportunidad hasta que me gané la beca para el curso de turismo rural en Israel.
En el 2007, Petra fue uno de los ganadores del concurso para seleccionar las 7 Nuevas Maravillas de Mundo. Más de 600 millones de personas votaron en esta elección. El turismo se disparó en Petra y en el 2010 recibieron 1 millón de turistas.
Desafortunadamente, la situación en Siria causó inestabilidad en la región, y esto asustó a los turistas. El número de visitantes bajó a 400,000 en el 2015. En 2017, obtuvieron 200,000 turistas más, incluyéndome a mí.
Jordania es un país que me pareció seguro, a pesar que tiene presencia militar en sus carreteras. La gente es super amable, y su dicho favorito es “you are welcome” que es español significa eres bienvenido.
Planifica tu viaje
Cruzar la frontera de Israel a Jordania no es fácil si quieres hacerlo por tu cuenta. Lo mejor es comprar el Jordan Pass, que incluye la entrada a Petra. Otra opción es tomar un tour. Nosotros optamos cruzar por Aqaba para disfrutar del Mar Rojo y luego alquilar un carro para manejar a Petra.
La mayoría de las personas que visitan Petra van por el día, a pesar que no está relativamente cerca de nada, excepto de Wadi Rum. Israel vende tours para conocer Jordania que pernoctan usualmente una noche en el desierto en un campamento beduino.
Considero que vale la pena dormir una o dos noches un hotel en Wadi Musa, especialmente si quieres ver Petra de noche. Eso fue lo que hicimos y al día siguiente la vimos de día. El primer día almorzamos mansaf, un delicioso plato tradicional que lleva cordero con yogurt, en “My Mom Recipe”.
Nos quedamos en Seven Wonders Bedouin Camp que nos organizó con un guía para ir por la entrada trasera de Petra (cerca de Little Petra).
Ese día, fuimos los únicos que entramos por la entrada que te lleva directo al Monasterio.
Cuando llegas aún no hay turistas y te toca caminar una sola vía hasta la entrada popular. Esto es lo contrario de lo que hacen todos.
Cuando salimos de caminar Petra decidimos darnos un lujo e ir al Mövenpick Resort Petra que es el hotel más lujoso de Wadi Musa, el pueblo junto a Petra. Es realmente un hotel espectacular, y el precio va acorde. Pedimos una opción de degustación y nos trajeron más platos de lo que pudimos comernos.
Para ir a Petra debes llevar zapatillas, gorra, agua (venden en sitio también), lentes de sol, protector solar y ropa cubierta que sea liviana. Además, no es recomendable ir en el verano por el calor extremo. La mejor temporada es la primavera (marzo-abril), sino ve en otoño (septiembre-noviembre).
Petra de Noche
Había visto en el Internet la opción de ver Petra en la noche. Llenan con 1,500 velas (en bolsas de papel) el trayecto que lleva del Siq a el Tesoro, famoso por la película de Indiana Jones. Me pareció algo romántico poder caminar por esa antigua ciudad iluminada. 4 personas están encargadas de ponen y quitar todas las velas.
Petra de Noche se hace tres veces por semana, los días lunes, miércoles y jueves. Debes estar en el centro de visitantes a las 8:30 p.m. para empezar este recorrido que dura dos horas. Los boletos se compran el mismo día, no se pueden comprar con anticipación. Pero no te preocupes, la cantidad es ilimitada. Usualmente no se llena tanto, pero en primavera que es temporada pico si pueden llegar más de 1,000 personas.
Ir de noche es totalmente diferente que en el día. El clima es más fresco y se puede ver una gran cantidad de estrellas mientras atraviesas el largo corredor de más de un kilometro conocido como el Siq. No realizas que tan altas son las paredes del cañón (80 metros) hasta que las ves en la luz del día. Cuando regreses de día fíjate en los canales a sus lados utilizados para cosechar y transportar agua.
Cuando finalmente llegas a el Tesoro te toca sentarte en el piso a escuchar música típica de los beduinos. El Tesoro tiene un frente masivo, de 30 metros de ancho y 43 de alto. Van a pasar personas ofreciendo un té de menta de cortesía. Luego sale un beduino tocando una flauta y te cuenta sobre la historia de los Nabateos en Petra. La verdad es que no se le entendía todo lo que decía.
Petra es mencionada en la Biblia
Hay evidencias de vida humana en Petra desde los períodos Paleolítico y Neolítico. Antes que llegaran los Nabateos, Petra era habitada por los Edomitas desde 1,200 a.C. Los hebreos conocían la ciudad como Sela o Seir y es mencionada varias veces en la Biblia. La rivalidad entre ambos fue larga y cruel.
Probablemente el pasaje más significativo en la Biblia es durante el tiempo de éxodo, cuando Moisés le pega a la piedra y sale agua. Esto sucedió en Petra. Moises le pidió al rey Rekem pasar y este rechazó su petición, pero permitió venderles agua y comida.
Entonces le toco a los hebreos tomar una ruta más larga. No podían pelear con los Edomitas porque esa no era la tierra que Dios les había dado. Antes de morir, Moisés puso una maldición sobre la ciudad de Petra y sus habitantes, “entonces nadie vivirá allí; ninguna persona vivirá en ella”y así mismo es actualmente.
El hermano de Moisés, Aaron muere cerca de Petra y en el siglo 13, el sultán Mameluk, Al Nasir Mohammad, construye un santuario en la cima del Monte Aaron en el rango de Sharah.
Grandeza durante el período Nabateo
Los Nabateos (con un poco de ayuda de los Romanos siglos después) fueron los que realmente crearon Petra como la ves hoy en día. Fue la capital del imperio entre 400 a.C. (con seguridad 312 a.C) hasta 106 d.C cuando fue conquistada por los romanos.
Petra se volvió una prospera ciudad de paso, siendo el centro de comercio de especias que involucraba lugares tan remotos como India, Grecia, Egipto y China. La población de la ciudad creció entre 10,000 y 30,000 personas. Cuando la visitas, puedes ver las cuevas en las cuales vivían una encima de otra, dandole la especie de precursores a los rascacielos modernos.
Para mantener su gran población, sus habitantes crearon un sistema hidrológico extenso, que incluía represas, cisternas, canales de agua tallados en roca y tuberías de cerámica. La zona era propensa a las inundaciones repentinas y a través del sistema creado podían tener agua para las sequías.
La ciudad empezó a decaer cuando los romanos tomaron control. Fue atacada por múltiples terremotos (363 y 551) y el aumento del comercio marítimo le quito la importancia comercial a la ciudad. Petra alcanzó su punto más bajo al final del imperio bizantino, alrededor del año 700. Desde ese periodo en adelante, la única actividad que se dio fue un puesto de avanzada construido por los Cruzados en el siglo 12.
Petra se abre al mundo occidental
La ciudad estuvo “perdida” para el resto del mundo por cientos de años. Hasta que fue “redescubierta” por Johann Ludwig Burckhardt, un viajero y geógrafo suizo que se convirtió al islam. Anteriormente, el Dr. Seetzen había tratado de encontrar Petra y fue asesinado.
Johann decidió cambiar su nombre a “Sheikh Ibrahim Ibn Abdallah” y se mudó a Aleppo, Siria para aprender árabe y estudiar islam. Hizo un par de viajes de prueba pretendiendo que era un pobre árabe, durmiendo en el piso y comiendo con los conductores de camello.
Fue asaltado varias veces por la misma gente que le pagaba para que lo protegieran, que eventualmente lo abandonaron en el desierto. Esto sucedió después de Amán en ruta a Aqaba. Por suerte encontró un campamento de beduinos y consiguió un nuevo guía que le contó sobre las antiguas ruinas. Le dijo al guía que quería sacrificar una cabra para Aaron y lo llevaron por el Siq hasta entrar a Petra en 1812.
En 1929, un grupo de cuatro personas empiezan las excavaciones arqueológicas en Petra. Múltiples pergaminos en griego que datan del período bizantino fueron descubiertos en una iglesia excavada cerca del Templo del León Alado en Petra.
Los arqueólogos sólo han descubierto un 15%, mientras que el 85% se mantiene aún debajo de la tierra.
En el 2016, usaron imágenes de satélite para descubrir una nueva zona monumental cubierta por la arena.
Patrimonio de la Humanidad
El nombre Petra se cree que es griego, aun que otras personas piensan que viene de la palabra arábica “batara” (como Baatara Gorge) que significa “cortar,” ya que la piedra fue cortada. Rekem era otro nombre antiguo para la ciudad. Rekem fue el rey árabe que inició la ciudad (y el que no dejo que Moisés pasara). Su nombre está inscrito en una piedra en Wadi Musa, a lo opuesto de la entrada de el Siq, pero el gobierno de Jordania construyó un puente en ese lugar y se perdió la inscripción.
Petra fue construida en un valle con acantilados de piedra arenisca que van desde los tonos rojos y morados, hasta amarillo y anaranjado. En el siglo 19, el erudito bíblico inglés, John William Burgon, la describió como una “ciudad rosa-roja, la mitad de vieja que el tiempo.”
Petra es un parque arqueológico que cubre 264,000 metros cuadrados que son parte de Wadi Musa. UNESCO listó el lugar como Patrimonio de la Humanidad en 1985. Para poder conseguir esta designación le tocó al gobierno de Jordania sacar a los beduinos de Petra y construirles nuevas viviendas. A pesar que los sacaron, parecieran que aun viven allí, porque le venden de todo a los turistas y puedes verlos durmiendo en cuevas y donde haga fresco.
¿Qué ver en Petra?
En la parte superior de el Tesoro hay una enorme urna llena de huecos de balas disparadas por los beduinos quienes pensaban que había tesoro en la parte de adentro. En la realidad era piedra maciza. No se guardaban tesoros en este lugar, sino era la tumba de un importante rey Nabateo.
Como las tumbas fueron talladas en las mismas piedras, más de 500 lograron sobrevivir todos los terremotos. Desafortunadamente, los ladrones lograron llevarse los tesoros que encontraron en esta antigua ciudad.
Puedes ver un gran anfiteatro romano con capacidad para sentar a 3,000 personas, que todavía está en muy buen estado. Su ubicación es en el pie de una montaña con vistas a las tumbas.
Si no tomas la ruta que hice yo, debes subir 800 escalones para llegar al sitio donde esta el Monasterio. Los Nabateos le dedicaron este templo al dios Obodas. Durante el periodo bizantino, el monasterio fue utilizado como una iglesia. Llegar es un poco agotador si no lo haces temprano en la mañana.
Puedes alquilar un burro para que te lleve en ese trayecto. Además hay camellos y carruajes con caballos. Siempre debes negociar con los beduinos, ya que es como un juego para ellos.
Más fotos de Petra:
